Gritando: ¡Hip hip urra por la vida!

¡Cuan gris está la tarde!
Hasta dolor en la muela de la razón tengo
¡Que rara me siento!
Que bueno salirse de ciertos monótonos vuelos.

Le debo un café al día
Debo sobrecargar a la vida de cafeína
La rutina de un éxtasis insólito llenaré
Para que el anhelo de vivir no pare de crecer.

Hoy el día anda roto
Así lo deseo, en miles de trozos cristalinos sobre el suelo,
Para que el espacio que ocupaba el execrable vidrio
Se llene de colores, de sonrisas y suspiros.

Agradecida estoy con la vida
Que no me deja comprar "bonos" de esencia
Sólo yo la edifico día tras día
Y por eso grito con ímpetu; ¡Viva, viva la existencia misma!

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